Hacia arriba y hacia adelante amiga!

 

Marcela Inés Dececo

Apoyada en el portal un ratito más, es la única imagen que puedo elegir ... ya me voy que es tarde ... a mi me gusta dormir temprano y a vos trasnochar, pero yo a las diez me duermo, me decías y te quedabas explorando la madrugada con mis locuras.
Así un ratito más te quedaste en el portal para que pudiéramos entender, para que tu tarea esté completa y el brillo de tu maestría volara con los tuyos.

Ahora y con mucha ayuda entiendo amiga, te suelto y te dejo volar, entiendo que algunos nos quedemos acá construyendo de este un lugar mejor y que a vos te toque reunirte con los tuyos y los maestros, en la fiesta de la ascensión. Ahora comprendo que no hay errores sino tránsitos de aprendizaje y que el ser pionera en esta vida te lo permite la sabiduría del camino transitado.

Y no te voy a pedir que me cuentes si es verdad jajaja porque me dejaste acompañarte tan cerquita de Dios como fue posible, hasta ahí donde se diluye nuestro ashrama y solo la luz de las estrellas se me permitió ver atravesada por tu vuelo y el de los tuyos, que te dieron la mano, las alas y la Belleza.

Difícil no pedirte un abrazo más cuando te veo magnánima, ganas de vivir cada minutos a ese estilo bien tierra que se replica en el cielo, en la belleza de Dios. 

Tu vida mundana la resumo en este apartado que te dejé en tu cumple, cuando supimos en complicidad que era la hora:

Hoy tu ángel de nacimiento me explicó los destinos, mi mirada era de amor y silencio, porque vi el todo sin poder entenderlo.

Me recordó que la gracia de los amigos es esa polaridad que experimentamos, una acá, la otra allá…todo junto …todo en cuotas. Caminando el mismo camino en los opuestos.

Tanto, tanto se mezcló el destino que la confusión me llevó a vivir en la playa y todavía me pregunto por qué porto este sueño, el que te animaste a soñar para mí porque yo no me atrevía.

Que se sepa que soy gracias a tus cafés y custodia de mis grupos.

Que se sepa que sos honrada y repartís las cuentas en partes iguales de maneras insospechadas, que cuidás el mango mientras yo despilfarro y que amás en silencio sin reclamar nada.

Que se sepa que cometimos errores, que tenemos secretos que se van liberando en la vida y en los años.

Que se sepa que me enseñaste a no quejarme y asumir la diversidad de los grupos que me tocan a cargo.

Que se sepa que me animaste a vivir la vida sin tanto protocolo y a meter las patas en el agua dejando que los miedos se los lleve la realidad.

Ir de viaje sí, no. Playa sí, no. Nos juntamos? Sí, no. Yo era la pata rancia que nunca quería nada y le temía a todo y vos intrépida por vivir me movías hacia adelante.

Experimentar y vivir, lejos de ponernos flota flota en la orilla, confiar en los propios recursos.

Nunca se te olvida un tema, cuando hay que ir a fondo en una investigación, no hay negación de mi parte que te detenga. (simplemente que soy más débil)

Belleza natural y sonrisa plena, la foto, la alegría genuina, que tapaba los desastres del ser humano en la cotidianidad, mate con bizcochitos y una bolsa surtida de papas fritas y chizitos para los peques lo resolvían todo.

Y bueno como aún sirve soñar, acá estoy con las sillas en el patio para escribir y meditar un rato, siempre pachorra lo mío pero ahhh en esa pachorrez me insiste tu ángel (lo conocés tanto) “la vida Es cada instante en el adentro y en el afuera, ambas polaridades en unidad integran la sabiduría del Ser. Maestra, sé tu maestría, la que está más allá del entendimiento humano.”

Te honro amiga.

Tu vida espiritual fue recorrer la Maestría paso a paso. La Formación de Canalizadores tiene ahora una maestra amada entre sus amados, organizate los grupos allá arriba que necesitamos cada tanto consejo o mejor dicho "que necesitamos tanto consejo".
Ahora estamos aprendiendo a seguir el camino de la luz con humildad. En las palabras del Maestro que nos mostraste como recorrer:

"Cuando llegue ese momento en cada ciclo y aparezca el engaño y el latrocinio, entonces
se oirá una voz. Obedece esa voz. Es la voz que dentro de ti escucha Mi voz, una voz nunca
escuchada por quienes aman el latrocinio. El mandato surgirá una y otra vez: “Restituye los
bienes robados. Aprende que no son para ti”. Durante intervalos muy extensos esa voz surgirá
nuevamente: “Restituye los bienes prestados; paga tu deuda”.
 Entonces cuando todas las lecciones hayan sido aprendidas hablará una vez más la voz:
“Restituye con alegría lo que fue Mío; fue tuyo, pero ahora es otra vez nuestro. Ya no necesitas
la forma. Libérate”. 

Fragmento de la Muerte Una Gran Aventura - Alice Bailey

Este aura grupal abraza a tus hijos en su más profundo amor y devoción al bien, expresiones vivientes del alma que crece en la verdad. 


Lo siento, lo siento, lo siento.

Perdón, perdón, perdón.

Gracias, gracias, gracias.

Te amo, te amo, te amo.