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Meditación con la Madre Divina Cósmica.

Ingresen al estado de relajación como cada uno de ustedes lo hace habitualmente, en un sentido amplio y completo. Incluso activen aquellos que reciben la relajación a través de la Acción, relájense moviéndose como es su costumbre.

Que los sentidos del alma estén despiertos y el alma grupal de la Humanidad se unifique toda en el abrazo de los que en cada tiempo realicen este ejercicio.

Mi voz no es un sonido es un arrullo, que se forma en la percepciones constantes de mi energía, en los oídos de aquellos que están límpidos y sanos para escuchar.

Sé hijos míos que este arrullo los acompaña y que es difícil para la densidad humana encontrar eventos en los que la realidad tome forma con la percepción celestial. Pero sean incipientes en esta costumbre de andar en el mundo de la Tierra como si del Cielo se tratara. Abran caminos. Abran canales de luz.

Comencemos por respirar profundamente este aire absolutamente blanco que les emano y por permitirse ser envueltos por la luz blanca, radiante y corpórea de la Madre Divina. Primero su cabeza, hasta que se impregnen las neuronas de su cerebro todas de esta mi placa activadora de las comunicaciones entre nosotros y ustedes y protectora de las vibraciones bajas de la humanidad dormida.

Que los nervios y venas de su cuerpo físico sean impregnados con el néctar blanquísimo de la Madre y a cada sector de su cuerpo físico llegue ésta mi luz, Tangible néctar que limpia y calma las vertientes adversas a su naturaleza estelar.

Cuando allí relajados se hallen, cuando allí inundados por la blanquísima luz, les invito a tomar mi mano y acceder conmigo a la Cámara de Reconciliación. Esta cámara la verán como un espacio enorme y sabrán perfectamente donde ubicarse, donde el rayo de luz irradiante sea su color más puro y las partículas de ADN cósmico coincidan con las suyas.

Y pósense bajo su Rayo de Vida en esta cámara de la reconciliación para a través de mi guía recibir las bondades del Espíritu (Dios Padre- Madre) colmado de alegría por este encuentro. Hallen en esta emanadora vertiente el atributo del origen de la luz del que son parte y reconcíliense con él. Reciban las cualidades divinas de su Ser Esencial estelar que están dispuestas en esta cámara de manera de ser receptivas a ustedes y que ustedes las reciban con gozo y reconocimiento.

Si permanecen bajo su rayo de luz unos instantes más en este espacio de reconciliación notarán que tanto han traído en luz como en aprendizajes a adquirir y que nada les falta sino todo les es dado.

Reconcíliense con sus dones y con su Maestro Interno que alegremente les recuerda que de cada uno de ustedes emana un sonido particular, una nota clave de Alegría y Verdad que forma parte de una maravillosa sinfonía, la Humanidad Viva, la Humanidad despierta, la Humanidad Crística.

Ahora es posible que sientan un particular cansancio, déjense caer y sentirán como desde su espalda un enorme ángel los abraza y los traslada dulcemente de vuelta a sus hogares humanos, pareciera que no pudieran hacer el viaje de vuelta solos pero si pueden, simplemente este ángel que envío a sostenerlos les reserva el proceso y la energía para que sepan claramente cuál es la condición humana en cualquiera de las vibraciones en las que se hayan. Siempre hay un ángel reconciliador con ustedes. Reconciliador con sus tiempos "pasado y futuro en el presente", reconciliador con sus hábitats "Cielo y Tierra" reconciliador con sus Rayos "Luz y Sombra" Y así en la encrucijada del Hombre cuando los dones son activados y recuperados, cuando las acciones son sosegadas o postergadas por las influencias desordenadas, y ese cansancio particular llega, sepan que están descansando como ahora en manos del Ángel Reconciliador que equilibra y restablece el camino a seguir.

Los dejo entonces en este descanso merecido tras recuperar sus dones en la conciencia humana, los dones que han traído para ser luces en la Tierra y los dones con los que hoy se reconcilian en el descanso con su Ángel Reconciliador.

Agrúpense con sus ángeles a ocupar su lugar en esta existencia. A cada uno hacerse responsable de sus acciones. a cada uno emprender el camino hacia adelante en la maravillosa luz de su individualidad.

Al despertar de este descanso la luz blanca los estará envolviendo y podrán respirarla toda de una sola inhalación hacia sus adentros y de esta manera brillarán en sus auras como seres crísticos en conexión blanquecina y vívida con la Madre Divina Cósmica.

Sean benditos. Reciban esta la flor de la reconciliación y la bendición de la Madre.

Amén.
Canalizado por Beatriz Sirio el 10 de Enero de 2017

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